domingo, 23 de septiembre de 2018





 CORAZÓN PRECINTADO




Un compás inexplicable, peligroso, de ritmo perturbado, 
 de tan inservible  se muestra como un viejo edificio ya ruinoso,
así lastima cruento, tan lejano de la vida, el corazón
que alimenta una vida en el exilio, unos sueños caducados.

No es posible concebir que lo acaricie el amor,
está envuelto en celofán, late al compás irredento
de los restos del naufragio, inconexo de la dicha,
un barco ya desguazado, pudriéndose lentamente
 en la orilla del ocaso.

Tan temprano, tan temprano.

El resto del alma mía , perdida sin su latir,
deambula medio existiendo, sin escoger una senda,
 pintando acuarelas tristes en lienzos imaginados.
Cuanto añoran mis mañanas una destello de tibieza,
una esperanza, ¿un por qué?, mas todo es incertidumbre
cuando el aire que respiro es oxígeno inventado.

Paco José González

  LA RABIA DE MI VOZ ¡Mi grito!... la voz sin tiempo, De alimaña fiel lamento, De aniquilado la muerte De la vida carne cruda, Atracones d...