domingo, 28 de diciembre de 2014

CRÓNICA DE UN INSOMNIO CRÓNICO

 (poema de una noche eterna)









Destrucción de lo indeleble, surcos…
el viento reúne pruebas para amar
y, locos bailan los arbotántes góticos
de una catedral imaginada y nocturna.

No es el cielo, es el grito inútil
de una manada de sombras; emigran.
Aúllan los bancos en el parque,
les pesa la noche tibia y previsible.
Nadie escucha contar los hilos del mundo.
Inesperado, un naufrago disfruta
del esfuerzo, se siente vivo, y canta,
se fue raro de la cena…
bendigo su impostura.

Me molestan los coches y las luces,
que nunca surcarán las avenidas,
son proyectos muertos de nostalgia,
breves pensamientos, un guiño cruel.


1 comentario:

  1. En esas noches eternas nos encontramos muchos sin querer la pastilla mágica que nos hará dormir sin sueños....
    Magistral y doloroso.

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